viernes, 31 de diciembre de 2010
I wanna be a killer like Courtney
lunes, 27 de diciembre de 2010
miércoles, 22 de diciembre de 2010
Infinita ingenuidad
sábado, 11 de diciembre de 2010
Ninguna postal por navidad
lunes, 6 de diciembre de 2010
0,0
¡Rayuela! Y apareció el cantante de Alors on danse estupefacto sentado en la silla.
miércoles, 1 de diciembre de 2010
Otra Cecilia
lunes, 22 de noviembre de 2010
Aquel día en que decidimos ir al Starbucks
ALONEALONEALONE. Soy una india indie que habla en plural para disimular.
sábado, 20 de noviembre de 2010
lunes, 15 de noviembre de 2010
Pon un surfista o skater en tu vida
lunes, 8 de noviembre de 2010
Dulces días salvajes
sábado, 6 de noviembre de 2010
miércoles, 20 de octubre de 2010
Indios avaquerados y vaqueros indiados
Me escondía tras el sofá con el arco de flechas en tensión. 09:11 am. Podía escuchar sus sigilosos pasos recorriendo el pasillo. Cuando me asomé, él cargó su pistola ágilmente y sin reparo. Me disparó y la afectada fue la ventana de atrás. Estaba acorralada. Y entonces salté por encima de los cojines rojos y solté con furia mi flecha rozando su brazo izquierdo. Sorprendido, perdió su pistola que voló por los aires. Se echó a correr hacia mí y los dos caímos encima del rojo sofá. Mis flechas salieron despedidas marcando nuestro territorio, aquel calentito comedor. Me puso en su sitio la corona de plumas y yo le pinté dos lineas en las mejillas para convertirlo en indio a él también. Luego le arranqué su estrella de sheriff y cayó justo al lado de Sandra Dee, la gatita que corrió con prisa a la cocina. 09:13 am. Frío que empañaba los cristales. Una manta que cubría indios y baqueros. Caímos rendidos en aquel sofá rojo.
Las nubes habían tapado el sol y una gota cayó sobre mi nariz. El sofá se volvió granate de repente.
viernes, 8 de octubre de 2010
Solía llamarle sueño... ahora me lo fumo
sábado, 2 de octubre de 2010
You're so fucking special
"Me levanto, descalzo, y avanzo, hacia la luz..." sigo hipnotizada por la voz más armónica que las propias armonías. "Dale gas" dicen ellos. Y sin querer canto "I'm a bitch, walking down the street" cuando camino por el Passeig de Gràcia. "Off off off with your headesta" es una puta droga, una de las duras, soy una jodida yonki de los lunes asquerosos. Estoy rodeada de pajaritos azules y sumergida en el aroma de una vela rojiza que altera mi sangre convirtiéndola en zumo de arándanos. Me falta, me faltas. "Alone through the clouds, alone on the ground, alone on the water [...] And always to be alone, we'll be alone forever." El melenas se mete en mi cabeza. Quiero que me muerda, darte bofetadas, romper a llorar, inundarnos en chillidos, romper la ropa, destrozar la almohada, sumergirnos en plumas blancas como las paredes de un manicomio recién pintadas. Y luego fundirnos en un beso eterno y no abrir los ojos nunca más. Amanecer con una cabeza de más y ser un doblepensador condenado a la muerte fatal. Y sentirme Blair pronunciando sus palabras "I'm not a stop along the way. I'm a destination." Y poder leer en tus labios la verdad cuando cantas Creep. No fingir serlo, sino encontrarme al señor Encanto alargando la mano a mi pelo para poder cortarlo con unas tijeras que tiene guardadas sin que yo sospechase nada. Harta de poner buena cara, de no saber que llevo el rimel corrido y que el carmín de los labios ya no es rojo. Envuelta en cinísmo, recorro las calles de Barcelona creyéndome Cecília Ce. Necesito más, mucho más.
In memoriam, Tena.
jueves, 23 de septiembre de 2010
Más allá de lo que un alma ordinaria puede ver
Noto tu presencia cuando estoy a su lado. Me gusta. Tu recuerdo son partículas de magia que fluyen por la brisa marina. Sé que no te preocupa, siempre le acompañas, excepto cuando te escapas un rato para espiarme a mi. El misterio encantador de unos ojos y la melena volando en dirección al horizonte sin orden ni rumbo fijo. Ese es el punto de fusión que nos lleva a su hechizo. Nunca serás substituida, pues tu magia yo no la he podido controlar. Me gusta saber que estás y así poderte permitir acercarte a él con mi ausencia.
miércoles, 15 de septiembre de 2010
BELLEZA
lunes, 13 de septiembre de 2010
Hello world I'm your wild girl
Aplicaba el carpe diem arrollando dragones y gnomos.
Eso revolvía su estómago al día siguiente y la jornada acababa en caos y anarquía, rock and roll.
I'm your ch ch ch ch ch ch Cherry Bomb!
El camino se retorcía entre el calor de las llamas.
Cuando daba todo por imposible veía High School Musical.
Pero se lamentaba por las largas tardes sin fundirse en abrazos.
La magia era insuficiente para inundar tantos minutos.
Intentaba pensar en las chispas cuando se torcía el corazón.
Aún así, veía diamantes desde ojos ajenos.
A veces pensaba que sus labios no estaban lo suficiente rosas.
Y entonces, volvía a repasarlos con un pintalabios nuevo.
miércoles, 8 de septiembre de 2010
El flechazo diario
miércoles, 1 de septiembre de 2010
1984 de George Orwell
sábado, 28 de agosto de 2010
¿Dónde está Willy?
El giraluna-Sidonie La historia que contaré a mis hijos antes de que sean unos adolescentes estúpidos
viernes, 27 de agosto de 2010
Cuenta ella sumergida en fragilidad
miércoles, 25 de agosto de 2010
Monotema recurr...
Justo habían acabado de dejar preparada la cena aunque sabían que esperarían con ansia el postre. Ella observó el sol esconderse entre las montañas desde la ventana. Él cogió su mano y la llevó al cuarto más cálido y pastel.
Entonces ella empezó a leer la Cuore y rompió todas las fotos de Sara Carbonero y tiró los trocitos al suelo. La habitación se inundó de carne, melenas morenas y bikinis azules. Él aprovechó para leer la revista sin que ella le soltara un "¡maruja!" de los suyos ya que estaba sumergida en su furia momentánea. Entonces, su hermanito pequeño interrumpió la escena entrando en la habitación con un chillido seguido de un gruñido creyéndose un león. Iba vestido con un traje del rey de la selva muy suave y descolorido. Saltó en la cama hasta ser atrapado por las manos de él que le sacó en volanda de la habitación. Pudieron oír el portazo que pegó el niño al salir como un cohete a lucir su traje por el bosque frondoso que rodeaba su pequeña casita.
Se arañaron, se mordieron, escalofríos, rompieron a llorar, chillidos, se mataron y resucitaron.
El chiquillo volvió a casa con cuatro rasguños y empezó la cena por el postre.
sábado, 21 de agosto de 2010
Ninguna limitación agría en vidas azules
viernes, 6 de agosto de 2010
Remper castillos para hacer otros nuevos más sofisticados
Amaba los aviones de papel, eran el espejo del viajero entusiasta.
Solía ir a comprar al Mercat de la Boqueria fruta de colores muy vistosos con un capazo de paja.
Comía chicle y chupachups muy a menudo.
Bailaba cada vez que su cuerpo se lo pedía.
Le gustaba hacer punta a los lapices incluso cuando ya estaban lo suficiente afilados.
Miraba a los ojos de la gente que paseaba por las ramblas.
Suspiraba con la brisa marina de la ciudad condal.
Canturreaba canciones de Belle&Sebastian.
El contacto del sol en su piel dibujaba una sonrisa en su cara.
El señor del quiosco estaba enamorado de ella en secreto.
Se compró una bicicleta vieja a la que bautizó como Fernando Fernández.
Decía que su gato era el amor de su vida.
HE:
Amaba los monopatines, le proporcionaban los metros necesarios para volar lejos de la Tierra.
Solía ir a la Barceloneta a hacer fotos de las melenas brillantes al sol.
Comía helados de café en verano y cafés calentitos en invierno.
Corría por las calles robando bolsas de zara, h&m y mango y luego las tiraba al aire pasados 10 metros.
Le gustaba morderse las uñas.
Miraba a los ojos de la gente que paseaba por las ramblas.
Sacaba humo de su boca lentamente como si fuera lo único que imporase en el mundo.
Cantaba al oído de la gente letras de canciones punk.
La caída del sol dibujaba una sonrisa en su cara.
La camarera del bar de la esquina le tiraba la caña todos los días.
Se compró la tabla de surf por la que tantas veces había suspirado desde el otro lado del cristal.
Decía que su gato era el amor de su vida.
Un lunes por la noche, él y ella bailaron hasta tropezar el uno con el otro. Ella le tiró el tequilakiwi encima. Pero él perdonó su torpeza en el instante en que ella le miró a los ojos con cara de "ups".
viernes, 30 de julio de 2010
No existo y tú tampoco
jueves, 15 de julio de 2010
miércoles, 14 de julio de 2010
¡Muérete ya!
Psicotropic lalalá. Aburrida, en el sentido amplio de la palabra. Vidas naranjas y monótonas pero yo las quiero sangrientas y repentinas. Puede que ya no me parezca tan insoportable la pequeña J. Había una vez una niña con trenzas rojas. Solía ir al río a tirar piedras. Un día se resbaló y murió ahogada. Nadie la fue a socorrer. Pobre niña bonita. Solo era una persona del espacio y no una vecina de aquellos pueblerinos. Para un niño de pelo oscuro y rizado era la niña espacial más compleja del momento. El tiempo pasó y la substituyó por una niña con una larga y lisa melena rubia. No la olvidará pero no se culpa por no ir a socorrerla. FIN. Solo los idiotas valen la pena. Cualquier cosa puede hacerme cambiar de opinión. Un diamante, por ejemplo. Ya estoy preparada para clavar puñales. La debilidad se pierde entre mis dientes. No sé lo que es eso. No estoy lo suficientemente feliz como para escribir cosas ñoñas. Nunca lo he estado. Seguiré fingiendo que me parece interesante la conversación. ¡A la mierda el romanticismo! A llevarlo al extremo, todo. Y a llevar un pintalabios cantón en el bolso por si acaso.
domingo, 11 de julio de 2010
El dilema
"No puedo estudiar. Es la imagen de tus preciosos labios y el recuerdo de su sabor los que me lo impiden.Es el aroma de tu hermoso pelo y su sonido cuando choca contra mi oreja.Es la suavidad de tu delicada piel que rozaba con mis dedos.Es la sensación de un/a excitante aroma/sintonía/textura/visión/olor al que llaman locura o también lo suelen llamar amor."
Sheena is a punk rocker
Sheena is a punk rocker
Sheena is a punk rocker
Era una versión de su canción favorita de los Ramones muy ruidosa pero su carcajada se puedo oír incluso desde aquel lugar lejano del que procedía esa llamada.
jueves, 8 de julio de 2010
Cosas que hacer antes de morir:
domingo, 27 de junio de 2010
domingo, 20 de junio de 2010
El viaje
Estaba sentada en mi cama, con el portátil en las piernas como de costumbre, pero de repente ocurrió algo extraño. La cama salió disparada y el portátil salió volando con unas pequeñas alitas blancas en los lados. Yo me agarré fuerte a mis sábanas de motivos chinos y surfeé por el aire a gran velocidad. Limpié los trozos de pared que habían quedado encima del colchón con las manos. Ya tenía controlado el ritmo y no me hacía falta sujetarme a las sábanas. Me tumbé con la cabeza para el lado contrario de la almohada. Dejé caer los pies sobre ésta. Con los ojos cerrados canté casi susurrando Tú me llevas de Zahara. Cuando acabé volví a abrir los ojos y me asomé por un lado de la cama para ver como el mundo se hacía pequeñito.
Vi a un niño que señalaba mi cama con el dedo y le decía a su mamá con cara de emoción que había una cama volando. Pero su madre no le hacía caso y continuaba hablando con un señor muy atractivo. Pasé por encima de un lago donde había una chica sin ropa peinando su melena a la orilla. Luego me di cuenta que había un chico haciendo el muerto justo en el centro del charco de agua. Me adentré por una ciudad llena de gris y sin nada verde. La contaminación sonora llegó hasta mi, cláxons de coches, chillidos de niños, derrapes, sirenas ruidosas, gente, perros, ningún pájaro. Respiré profundamente el aire tóxico de esa ciudad y sonreí desde allí arriba a aquel gato que miraba desde un árbol. Yo creo que los gatos siguen mirando fijamente incluso a quilómetros. Incluso cuando tu vista no llega a verlos, ellos te ven a ti y te miran detenidamente. Me alejé de la ciudad a un lugar lleno de árboles. De pronto escuché una música muy acelerada. Entre las hojas se veían chaquetas multicolor, crestas y rastas, torsos pintados, sombreros, bebidas fluorescentes, lucecitas y una hoguera hecha con trapos de colores. Un chico rubio y otro pelirrojo se besaban entre la multitud de personas que bailaban locamente bajo los efectos del LSD. La música desapareció. Mi cama avanzaba y se podía ver a lo lejos unas casas junto a un río. En una barquita habían un niño y una niña. La niña tiró al niño al agua y luego saltó en su rescate. Sus risas se oían con gran potencia. Cuando llegué a sobrevolar el pueblo un poco alejado del río, puede ver un chico sentado en un columpio llorando. Una chica con un vestido de florecitas azules le miraba desde un banco. Cerca de la plaza había dos amigas que se dieron la mano en ese mismo instante esperando un autobús. Por un camino que comunicaba el pueblo con otro más grande había un grupito de adolescentes con bici, había tres aventajados que hacían una carrera desde una bajada muy empinada. Cerca de allí estaba el mar, junto a unas rocas tres chicos se divertían saltando y volviendo a subir para hacer un salto con acrobacias incluidas. No muy lejos de las rocas había tres chicas tomando el sol pendientes de los saltarines y de su bronceado. Un poco alejado de la costa había un barquito donde un joven moreno despeinado escribía en una pequeña libreta, justo al lado tenía una guitarra. No parecía tener prisa. Disfruté la brisa marina durante unos minutos y me encontré con un par de gaviotas que volaban alto. Se hizo de noche y el viaje de vuelta estuvo lleno de pequeñas lucecitas agrupadas en unos puntos concretos.
Cuando llegué a mi habitación, dormí plácidamente. Al día siguiente cuando te lo conté, me llamaste tarada y soltaste una carcajada, yo me reí contigo y abrazados vimos como la chica de enfrente se comía un helado de dos bolas, una rosa y la otra blanca, de fresa y nata desde tu sofá, doble.
martes, 15 de junio de 2010
Es como un gran AHHH AHH AHHH!
No voy a hablarte de él, sino de ello. Podría contarte mi estado de felicidad suprema, lo extasiada que estaba, los sentimientos más realistas y a la vez hipersubrealistas que pasaron por mi mente en ese momento... pero no lo haré, porque no me entenderás, pero podrás recordar algo parecido que te sucederá o imaginar algo parecido que te sucedió. Solo requiere que vivas la vida con intensidad y creas en ella dramáticamente. La molonidad del extremismo psicotrópico.
sábado, 12 de junio de 2010
El mismo tema de siempre con una pincelada de realismo un tanto preciosista
No podía creer en el amor todavía, un día te levantas y lo sabes, sabes qué es. Pero tiene muy claro lo que le gusta AHORA. Recordó aquello de "Colorea mi vida con el caos de los problemas". No podía estar segura de que mañana amaría los perros en vez de a los gatos... pero eso no le quitaba intensidad a su amor por los gatos en aquel momento. toc-toc. Era la felicidad, aquella que sucede un día, una hora, un minuto y un segundo entre tantos.y la que nadie le aseguraba en un futuro pero eso era lo que ella esperaba.no hay momentos felices sin saber como son los momentos tristes. ¿Evitaba los problemas de la profundidad de los sentimientos? no, simplemente no los conocía, por eso no estaba prevenida ni le interesaba prevenirlos.