Aullamos, aullamos, aullamos, auuuuuuuuuuuu



lunes, 22 de noviembre de 2010

Aquel día en que decidimos ir al Starbucks

Una vez esfumado el momento del hecho, el recuerdo sabe incluso mejor que aquel estado fatídico y a la vez orgásmico producido en tu organismo. Almacenamos recuerdos como tesoros. Y gracias a ellos y el ansia por acabar la colección con las mejores joyas, seguimos vivos. El problema es que los románticos acabamos siendo esclavos de ellos en el día a día, y cuando llega el momento de la verdad, escapamos de alguno de ellos, el que ya predecíamos y anhelábamos. En cambio, resistimos al más profundo sentimiento de impotencia y conseguimos llegar al éxtasis.





ALONEALONEALONE. Soy una india indie que habla en plural para disimular.

lunes, 15 de noviembre de 2010

Pon un surfista o skater en tu vida



Solo necesito una vocecita como la de Luke Pritchard que me cante a la oreja... y que sus labios sepan a chocolate. Que sus manos caminen entre mis rodillas y me expliquen cuanta vida tienen. Que el aroma de hierba de la risa no se escape a la sombra de las nubes grises por la rendija de las puertas del comedor. Pero el placer no llega sin pasar por el juego. Y este debe de ser un juego de Amélie con un final feliz. Aunque el dramatismo es más mi estilo. Pero no están permitidos los zombies. Así que no valen los cuchillazos. Pero creo que es demasiado tarde. Tal vez el caos mental de Willy es debido al agrado de los extremos, es insano. Lo que se tiene que hacer es lo siguiente. Simpatizar con Gauguin y otras mentes enfermas; besos insignificantes y caricias viciosas, nada más; volverse más estúpido con el tiempo; cansarse pronto de lo intenso y que se convierta en nada; no estar atento, soñar, volver a ver el mundo de las apariencias y apariencias y criticarlo a muerte; ser radical, bipolar, contradictorio, absurdo, idiota y sublime; mestizos; cometer un crimen, matar a Courney Love; adulterio; necesidades básicas: comer (muffins de chocolate y sobaos), hacer pipi (muchas veces si bebes cerveza), Nasty Mondays, tumblr, dormir calentito. Pero seguiré el I never sleep anymore. Demasiadas cosas bellas para aferrarse solo a una, sigo con lo mismo. Además, Freddy ya no está.
DESPELOTE!

lunes, 8 de noviembre de 2010

Dulces días salvajes


Cuando me robó aquel beso le pegué un bofetón. Le había dicho que no lo hiciera y él me había dicho que no lo haría. Íbamos al lago a bañarnos desnudos. Acampabamos en el bosque escuchando lobos ficticios. Íbamos juntos a conciertos orgásmicos. Dormíamos abrazados en la caravana escondiéndonos de la sociedad civilizada. Nos casamos en la playa. Me tocabas los morados de las piernas y yo me enfadaba. Escuchábamos música tardes enteras de domingo. Íbamos a comer cada uno a un restaurante distinto. No te gustaba mi nueva canción que tarareaba durante todo el día. Te preparaba crepes. Me regalaste un gatito. Iba sola al cine. Te tiré los calcetines por la ventana. Te mordí una pierna. Me ignorabas. Te odiaba. Nos divorciamos. Me odiabas. Le grité al gato y tú tenias la culpa. Vi un ciclo entero de cine expresionista alemán. Comí arroz tres delicias y paseé al gato en brazos por el Borne. Me compré un vestido en el Topshop. Y te vi pasar de la mano con otra. Tiré el móvil al suelo.