Con calma y con mimos

No tengo ni idea de lo que he comido, pero puedo recordar cada sitio en el que he estado este año que nos deja justamente esta noche después de que Belén Esteban no se equivoque y haga comer a toda España las uvas en los cuartos. Mallorca, Santander, mi Barcelona (ahora te conozco un poco mejor, señorita), Ódena, Suances, pueblecitos burgaleses, Lleida... han sido pisadas por mis fabulosos pies siempre con pupas de las rozaduras. Incluso he ido cuatro o cinco veces en taxi, esto ya es otro nivel! Además, también puedo recordar los que me rodeaban en esos momentos, "caras nuevas" ejem, ya sabéis que que hablo, las mismas caras de siempre y algunas fugaces pero derrochadoras. Y me gusta poder recordarlo, me gusta el 2009 y esto lo dice una dieciochoañera sisisi, que tengo 18! Que regalazo me ha dado el señorito 2009. Y creo q voy a acabar el año con malos rollos.. aiaiai.. bah! no! no dramaticemos que como dice Argiñano, con calma y con mimos, siempre con calma y con mimos;) ENERGÍA POSITIIIIIVA lalalala. La vida me tiene fascinada, espero que os fascine a vosotros, mis fieles seguidores (una prima que me sigue por compromiso, una amiga que no se acuerda del nombre del blog, una romántica que no creo que se haya leído ni dos textos y un gallego medio tarado que es muy ñaa!). Chaito 2009!

¿Quién vive en una piña en el fondo del mar?

-Boob Espoonja!!



Hoy me siento como un niño que mira fijamente los ojos de un adulto, que observa un pájaro detenidamente preguntándose porqué es verde y porqué tiene un canto tan bonito, que ve pasar un barco y sigue la linea blanca que va dejando hasta que se confunde con el azul del mar, que se fija en los zapatos rojos del señor que viste elegante con traje, que imagina volar como un pájaro entre la sincronización de los gorriones, que sueña con subirse al globo que todavía está en tierra. Hoy me siento como un gato que salta de un tejado a otro, que camina sobre suelo firme, que se mete entre los agujeros más estrechos, que trepa los arboles y luego no sabe bajar. Hoy me siento como una palabra de una canción de Nirvana, eléctrica.

Lola nananana Lola

AMISTAD

Iban cogidas del brazo y hablando del nuevo vestido rosa brillante. Se pararon delante de un escaparate de ropa cara, muy cara. La modelo de la foto tenía aires de muñeca de porcelana. A ella le asustaban las muñecas de porcelana, y los payasos. Su amiga se rió, porque ella adoraba las muñecas de porcelana y le entusiasmaban los payasos. Una le mostró lo bonito que estaba el cielo de ese color. Las dos se quedaron embobadas mirándolo. La brisa era fría, tremendamente fría, de esas que te dejan la nariz roja roja roja. Ella tenía una bufanda larga de lana y su amiga tenia la misma de color distinto. Pasaron frente la cafetería más chic de la ciudad y ella le soltó el brazo para pegarse al cristal. Estaba ahí, "¡Mira!", era el camarero más sexy del planeta. No competían el gusto por los chicos, pero él... Después disimularon un poco, igualmente ya las había visto como dos taradas pegadas a un cristal. Entre risas salieron disparadas a buscar el cine más cercano. Una quería una comedia, la otra una romántica. Decidieron ver la más bestia que estrenaban. Aquella tarde no se repitió. No volvieron a ver una película de acción juntas. Ya no comían batidos y palomitas. Ella pensaba en su amiga. No se despidió. Decidió morir en vida. Su madre lloraba. Su padre le gritaba. Su cuerpo le pedía auxilio. Se miró al espejo y lloró, lloró hasta caer rendida. Entonces ella llegó, llegó a tiempo, pasó al cuarto de baño y le dio un abrazo. Le susurró al oído: "Te ayudaré pero antes tienes que ayudarte tú misma, te quiero".

"Ella sueña con despertar en otro tiempo y en otra ciudad, dejarse llevar suena demasiado bien..."

5:03 minutos en silencio mientras suena con olor a vinilo 'Copenaghe'. Las miradas fijas atraviesan los ojos cristalinos, o no tanto. Son cómplices. La estufa está desenchufada y las mantas arrugadas inundan el sofá de tono pastel. Los cuadros inmensos cubren paredes empapeladas en los 80. Se cierra la puerta, es Rodrigo González, el gatito peludo. Es un pisito viejo en el centro de Barcelona, de esos que no sabes si continuar subiendo escaleras o parar a respirar. La purpurina fluye por la habitación mientras las miradas del chico del sombrero y la chica del carmín rojo, muy rojo, cruzan las miradas y sienten el frío del suelo en sus cuerpos. No quieren pensar en el muñequito rojo enfadado y el muñequito verde con prisa del semáforo, el ritmo frenético de la ciudad está tan cerca y a la vez tan lejos. "No te preocupes, déjate llevar, haremos lo que nos apetezca, no nos haremos daño, solo eso. Serán besos y abrazos eléctricos con la energía de nuestras almas solitarias ahora unidas como las luces del árbol de navidad."

Courtney Love is a fashion killer

Piso los charcos con mis nuevas katiuscas de topos. Y mientras me coloco bien la bufanda para que no me entre el aire por el cuello pienso una tarde lluviosa viendo a Chuck intentar decir las dos palabras mágicas, (con 8 letras para ella) pero no lograrlo. Y me preocupa Berlusconi, con tanta movida no podrá preparar un fiesta navideña como Dios manda. Con los dedos cuento las cosas que me gustan: las máquinas tragaperras, mantener la mirada a un gato, mi bloque multicolor, el Salón de la infancia (este año es el Saló Astronòmic!!) y otra cosa que ahora no me acuerdo.
Pete canta himnos nazis, Kate promueve la anorexia y Mischa declara "soy una vergüenza". ¡Qué desastre!

'Nunca': Es terrible. 'Siempre': Es horrible. Prefiero el 'muchas veces', 'aveces' o 'alguna vez'. También el 'casi nunca' y el 'casi siempre'. En este caso los extremos no me gustan. No me suele pasar muy a menudo. Nunca digas nunca y nunca digas siempre. El 'siempre' no solo horroriza a Chuck Bass (como le adoro). Y el 'nunca' tiene que ver, bueno, también con Chuck (será que todo me recuerda hoy a él...). Lo que está claro es que existe la ley de la gravedad. Pero ¿existe la realidad? entonces el siempre no tendría valor, pero sí el nunca, porque seria todo nada y no habría existido nunca.
¡Ai! que cosas que se pasan por las cabezas de gatos zombies que pretenden dibujar unos ojos y uno les sale más grande que el otro.

mariposas en la cabeza

oh, ¡que puta es la vida!

Adelantando acontecimientos por si acaso...

Querido Papá Noel:

Este año no voy a ser tan exagerada con mis pedidos y con humildad solo te voy a pedir un francesito-despeinado-de-ojos-pequeñitos-y-si-puede-ser-claros-y-labios-grandotes-que-fume-cigarrillos-franceses-y-se-llame-un-nombre-de-lo-más-común-en-Francia.

Graciaas!

Tiene complejo de mariposa

Quiere volar. Quiere llamarle y decirle: te odio. Quiere componer canciones bajo las luces de la negra ciudad. Quiere sentirse la reina de la casa. Quiere romper cosas. Quiere ser eternamente adolescente. Quiere probar todas las fragancias de la tienda de cosméticos. Quiere coger un pedacito de aquí y de allí. Quiere soñar que soñaba. Quiere pintar monigotes en cualquier parte. Quiere reír sin parar. Quiere cambiar. Ayer lo hizo.

'Els guapos són els raros'

No es tan difícil encontrar un ratito de felicidad. Para unos es el placer de tomarse un café, para otros, encontrar la combinación que consideran "perfecta", y para muchos otros, un abrazo de un ostito de peluche enorme con el calor sospechosamente humano. No nos hace falta un camión lleno de chocolate, no pedimos un amor como el de Bella y Edward, no necesitamos encontrar el trébol de cuatro hojas (aunque no estaría mal). Pedimos más de lo que necesitamos. Somos ambiciosos, soñamos, queremos más. Eso está bien, joder. Pero eso es porque "tú i jo mai ens em banyat al mar" como dicen los Manel. Pues ¿qué mejor que bañarse y recordar lo maravilloso que es?

Las luces cubren nuestro estúpido mundo

Ya se puede respirar el ambiente navideño... Es hora de olvidarse de la crisis y coger el carro más grande del supermercado más inmenso para llenarlo hasta que se caigan las cosas por los pasillos, o eso dice Coca Cola. Yo, dentro de mis contrariedades, odio el consumismo, pero me pone de tan buen humor... siempre están en conflicto mi parte más sensata (sí, existe) y mi parte más...como diría? inconsciente. Quiero ir al Carrefour, observar la sección de libros, la de cds y luego la de Barbies. Quiero coger un paté especial y los minihuevitos de codorniz. Son unos días que mi cuerpo está en plena armonía. Será porqué el reloj ya no me importa. En navidad escucho a los Pereza, sí, para mi son muy navideños con su estrella polar y esas cosas. Llevo bufanda y mi abrigo más largo. Decoro toda mi casa con la ilusión de cuando era enana (aunque lo siga siendo^^) pero flipándome como si fuera Lyona o una gran diseñadora de interiores. Provablemente vea alguna de HSM que me pongan en Cuatro. Hace frió ahí fuera, sí, joder, hace fríooooooooooo! y me gusta, no, joder, me encanta. Regalos, regalitos... aaaaaaaaahhhhhhhhhh, adoro la navidad! que poquito queda... y que fugaz es...