Aullamos, aullamos, aullamos, auuuuuuuuuuuu



miércoles, 14 de septiembre de 2011

La vida es una tómbola

Elefante pequeño, llamado Elefantito, cursó sus estudios en casa. No conoció por entonces a otros pequeñajos/adolescentes/jóvenes elefantes. Su mamá era gorda. Su papá llevaba siempre pajarita de cuadros. Su maestro tenía gafas redondas y un quitamoscas. Elefantito corrió bosque abajo y dio doce vueltas de campana que le llevaron a caer de culo en el asfalto. Se levantó dignamente, se limpió las nalgas y divisó con una pata sobre los ojos el horizonte. Pisos por aquí y por allá. La vida civilizada. Elefantia. Un elefante anciano apareció en escena con un: "No des un paso más, pequeño, o estarás perdido". Y luego el elefante viejote salió volando con sus orejas como alas silbando el himno americano. Elefantito cruzó la frontera, se adentró en lo que sería luces de neón por la noche. Se enamoró de una elefanta, aunque también se podría haber enamorado de cualquiera de sus amigas. Se casaron, hicieron una boda de elefantes por todo lo alto. Tuvieron sexo. De ahí sus tres elefantines. Elefantilla, la menor de los tres hermanos, se escapó al bosque y vivió en la cabaña de sus abuelos (ahora fallecidos) rebelándose así contra las leyes impuestas por sus padres. No sabía que aquella había sido la casa de su papi hasta que encontró una foto de Elefantito con el rostro lleno de acné. Se partió la caja. Esa noche se tiró a un elefante salvaje que venía de la India, le comentó tras el acto. Se había quedado sin chicles y fue a Elefantia a por reservas de gomas masticalbes rosas de esas. Esto no se acaba aquí. Elefantilla murió de aburrimiento. Fue un entierro muy digno, sus hermanos llevaron sombrero de copa.


RIP Elefantilla


de luz y de color, de luz y de color
lo interesante está en las nubes, no aquí, pringui
un aplauso para la señora Medio y a su estimada hermana Cridad
la luna llena me ciega
monja

2 comentarios:

Lara dijo...

AAAAHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHHH.

Me encantan los elefantes. La mediocridad no, pero tu no la conoces, don't worry. Miau.

Anna dijo...

Era rosa? Me l'he estat imaginant rosa tota l'estona. I a la dona. I a les criatures. Als pares no, als del primer elefantet, dic. No sé per què, no m'havia plantejat de quin color havien de ser.

Tots pintats a aquarel·la, probablement.

opodati