Yo solo hago ceniceros de barro de colores que se seca con el sol de invierno en el suelo de mi pequeño balcón.
Aullamos, aullamos, aullamos, auuuuuuuuuuuu
jueves, 19 de noviembre de 2009
Me pongo el sombrero para que no se escapen los sueños♪
No canto. Solo sigo las melodías en un tono simbólico. No escribo. Solo lleno mi cuaderno con notas que intentan ser curiosas. No dibujo. Solo trazo grandes líneas q crea gigantescos ojos. No bailo. Solo continúo la armonía con unas ondas sinuosas en mis brazos flotantes. No pinto. Solo mezclo los colores creando una situación caótica. No hago fotografías. Solo plasmo los instantes y las casualidades de la vida con subjetividad bajo un solo clic. No proyecto edificios. Solo construyo pequeñas montañas de arena mojada en el parque o en la orilla del mar y torres de cintas de casette de Nirvana. No cocino. Solo hago crêpes y caramelo de azúcar de vez en cuando. No diseño. Solo fusiono una pieza punk con unos pantalones Emporio Armani de segunda o cuarta mano. No creo películas. Solo me imagino secuencias bonitas.
miércoles, 18 de noviembre de 2009
Chocolate blanco Y chocolate extranegro!
No soy camaleónica, es que simplemente conviven sentimientos opuestos simultáneos dentro de mi corazoncito de peluche que guardo a la izquierda de mi repugnante corazón. Adoro la fama, los pijos, adoro los hippies, los okupas. Pero también los punkies y los skaters. Me gustan los Rolling Stones y los Beatles, oh, que escándalo. Escucho a los Jonas Brothers y a Tokio Hotel, pese a odiarlos sus canciones me enganchan, joder! Disfrutaría tanto en el mundo de los Telettubies (http://www.youtube.com/watch?v=LdKVQrWt1II) y me imagino de una manera tan novelesca en las casas señoriales del Paseo o de la Avenida Balmes. A las dos y media recorro la corriente azul que va desde el tren vintage hasta la plaza del césped. El agua fluye. Me gusta. Me caliento las manos con mi menta poleo, es un ritual. He visto a unos niños jugar frente el antiguo bloque verde, ahora tricolor. Tenían una lata y dos palos, simulaban una especie de hockey. Me he puesto melancólica y he recordado mis canicas por la arena, ahora ya inexistente, y los tazos saltando en el bordillo, un banco, dos personas sentadas y un perro haciendo un agujero en el suelo. Me gusta Mika porque no cede todos sus temas al amor romántico, sino al amor universal. Me gusta el nuevo disco de Sidonie y el viejo. Digo mucho me gusta. Repito a menudo "¡Qué guay!" o "¡Cómo mola!", sí, soy muy fascinable.
lunes, 16 de noviembre de 2009
domingo, 15 de noviembre de 2009
La siesta es mucho mejor en sofá, indiscutible
-¿De qué iba la película?
-De niños que no querían dormir.
-¿Porqué?
-Querían jugar.
-Bueno, cuando sean grandes ya tendrán ganas de dormir.
-No lo creo. Después no querrán dormir porque querrán salir por las noches, luego porque querrán hacer otro niño nuevo entre sábanas, después ese niño nuevo les quitará el sueño con sus llantos, más tarde no aguantarán en la cama por los dolores de la vejez.
-La vida es un sin dormir.
-Ya ves.
-Ya ves.
miércoles, 11 de noviembre de 2009
Los niños del mañana, vaya hijos de puta
Erase una vez la niña de la camiseta de Bob Esponja (made in Vilafranca) y su molinillo verde aceituna, verde pistacho, verde césped, verde árbol, verde Heineken, verde día, verde chiste, verde tortuga, verde kiwi, verde fluorescente, verde cocodrilo, dependiendo de si era hora punta o si pasaban dos minutos de y media, el molinillo concentraba sus variados colores en uno y surgía un arco iris en el suelo que solo la niña podía ver y pisar. Nunca dormía. Vivía con su amigo Mil en la cabaña del árbol. Cada día bebían el té junto al sofá verde militar, en la alfombra verde periquito. Mil cantaba ópera. Ella bailaba imitando a las grandes del ballet. Cuándo Mil salió volando, Lai saltó del árbol y volvió a casa a decirle a su mamá lo bien que lo había pasado con su amigo de los viernes. Mamá le respondió: "Cariño, tienes que tener amistades más duraderas, sino acabarás como tu tía Irene."
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