Cuéntame cosas de ella, le dijo con dos pocitos en las mejillas. Su película favorita era Grease. A mí también me gusta mucho. Y a mí, pero porque le gustaba a Lola. ¿Y qué más? Le encantaba el metro, siempre hacia el recorrido más largo posible para llegar a un lugar. ¿Y qué detestaba? Los helados de fresa. Vaya, a mi me encantan. ¿Sabes? Tengo muchos polaroids de ella, me encantaba retratarla, era tan preciosa, como tú. ¿Quieres verla? Sí. Sacó un polaroid del bolsillo. Ella se quedó como hipnotizada mirando la foto. Tiene un pelo muy bonito. Lola era rubia. Perdona, no me he presentado, soy Lucas. Encantada, Lucas. Oye, ¿Cuál es tu parada? Hace rato que la hemos pasado. ¡Vaya! La próxima es la mía. Y tú, ¿qué detestas? La chica lo pensó durante unos instantes. El olvido. Le regaló la fotografía. Nunca olvides lo que no quieres olvidar. El metro se detenía. Ella le dio un beso en la nariz y salió disparada.
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